El mediodía del sábado 18 de mayo, una saeta azulada atravesaba el canal de Amute desde el aeropuerto de Hondarribia, y se internaba en el corazón de Plaiaundi. Era ....!¡ una Carraca ¡!
Itziar Gutierrez y Martín Larrañaga la habían localizado desde el vértice de observación de Itzaberri (el corner). Habían visto la trayectoria del ave y siguieron sus pasos hasta localizarla.
Se hallaba en una de las higueras que bordean las pistas de atletismo, y allí permaneció más de una hora. Cuando llegue no estaba en ese frutal, pero...pasados unos minutos, apareció en el ciruelo cercano, a escasos metros de la higuera.
CARRACA EUROPEA / CORACIAS GARRULUS / KARRAKA
Cada cierto tiempo, volaba desde las alturas saltando hasta el campo de rugby para alimentarse. Eran vuelos cortos y rápidos. Una vez localizada y apresada la pieza, volaba de nuevo hacia su posadero.
Todo el fin de semana del 18 y 19, la lluvia y las rachas de vientos fueron incesantes. El mal tiempo apenas dio tregua. Y fue ese temporal el que empujó a nuestra protagonista a buscar refugio en Plaiaundi.

CARRACA EUROPEA / CORACIAS GARRULUS / KARRAKA
El primer día, sábado 18, apenas se movió del ciruelo, más que para alimentarse. Con esas condiciones climatológicas, el personal que habitualmente hace deporte no apareció por las pistas, y la Carraca disfrutó de gran tranquilidad.
El domingo 19, la cosa varió. A media mañana comenzaron a aparecer deportistas en las pistas y cada vez que se acercaban a su zona, se espantaba y volaba por los aledaños. Luego, volvía a su zona de querencia.
El lunes y martes, el tiempo mejoró, pero todavía seguía en la zona. A partir del miércoles 20, no se ha vuelto a localizar. Es presumible que siguiera con su periplo migratorio, en cuanto amainó el temporal.
La subespecie típica en España es la Coracias garrulus garrulus, de presencia estival, y que inverna en la mitad sur de Africa.
Es de gran atractivo visual, por su plumaje contrastado espectacular, entre los tonos acastañados del manto y dorso, y los azulados del resto de su cuerpo.
La anterior y única cita de la que tengo noticia en Gipuzkoa, fue el avistamiento realizado por Alfredo Herrero, en el monte Igoin, cercano a las cuevas de Landarbaso (Errenteria), el 16 de agosto de 2011.
Escasísimas las Carracas que se acercan por nuestra zona. ! Una gran suerte haberla podido disfrutar !