El sistema de Corrales es una técnica de pesca antiquísima, presumiblemente romana o árabe, que todavía se puede observar en el litoral gaditano. Se trata de unos recintos cerrados a base de piedra porosa, instalados en la línea de playa, que se llenan de agua de mar con la pleamar y que quedan al descubierto con la bajamar. La piedra está fuertemente unida con la argamasa natural que forman ostras, algas y bellotas de mar.
Los Corrales se vacían durante la bajamar a través de desagües enrejillados llamados caños. Los peces quedan atrapados y son recogidos por los pescadores, allí denominados catadores.
Aunque durante años los Corrales fueron abandonados, en la actualidad se encuentran rehabilitados.
En la imagen los Corrales de Chipiona, en una foto aérea cedida por el Club de vuelo LA BALLENA, a quienes agradezco su amabilidad.
CORRALES DE PESCA DE CHIPIONA
En mi periplo gaditano, me acerqué por la zona el 10 de agosto. Estaba observando estos corrales desde la playa del Camarón y, la vista se me fue a la pluma. En los pequeños diques interiores, se situaban diversos limícolas descansando. Al mismo tiempo, en otra zona del corral, había un incesante movimiento de charranes.
CHARRAN`PATINEGRO joven / STERNA SANDVICENSIS
Diré que el interior de dichos corrales es muy pedregoso y lleno de irregularidades y, en aquel momento, cubierto de medio metro de agua. Con paciencia y algún traspiés donde temí por la óptica, fui adentrándome en el recinto y esto es lo que fui descubriendo: la especie más numerosa era el Charrán patinegro ….
CHARRAN PATINEGRO adulto / STERNA SANDVICENSIS
… pero en el grupo había una grata sorpresa: un charrán de pico naranja, que en principio, pudiera tratarse de un Charrán bengalí.
CHARRAN BENGALI entre Patinegros / STERNA BENGALENSIS
De pico anaranjado brillante en los adultos, por lo general su tamaño es algo menor que el Charrán patinegro. En este caso, sin embargo, no cumple esta premisa, ya que se trata de un ejemplar igual o incluso algo más grande. Esta característica me ha hecho pensar en un Charrán real pero, en ese caso, el pico sería más grueso y la librea más clara.
Enviada la cita al Comité de rarezas de SEO, dicho Comité dictamina que se trata de un Charrán bengalí (Ardeola nº 65, 2018).
Enviada la cita al Comité de rarezas de SEO, dicho Comité dictamina que se trata de un Charrán bengalí (Ardeola nº 65, 2018).
CHARRAN BENGALI rodeado de Patinegros/ STERNA BENGALENSIS
CHARRAN BENGALI / STERNA BENGALENSIS?
En uno de los grupetos de charranes, se encontraba un ave que destacaba por su menor tamaño. Por su postura, no se perciben bien características importantes como el manto o la prolongación del capirote. Tampoco pude observarlo en vuelo. Pero, tiene las patas rojas y más bien largas y el pecho y la frente blanca. Parece tratarse de un Fumarel aliblanco.
FUMAREL ALIBLANCO / CHLIDONIAS LEUCOPTERUS
En el mismo entorno, en otra de las montoneras pedregosas, se hallaba este elegante Charrán común, que me entretuvo con sus gráciles movimientos. No paraba de moverse y de zambullirse. Lógicamente, los corrales, al ser recintos cerrados, se convierten en magníficos cazaderos, además de zona de descanso.
CHARRAN COMÚN / STERNA HIRUNDO
Entre los pequeños limícolas pude observar Chorlitejos patinegros, Correlimos comunes, Correlimos tridáctilos, Vuelvepiedras (alguno de ellos con restos del plumaje nupcial)…
CORRELIMOS TRIDÁCTILO / CALIDRIS ALBA
VUELVEPIEDRAS / ARENARIA INTERPRES
Ya cuando iba saliendo del Corral, en un lateral se posó una gaviota que resultó ser una Audouin, el segundo ejemplar observado en esos días que he pasado por la costa gaditana.Un buen epílogo para esa tarde disfrutada en los Corrales de pesca de Chipiona.
GAVIOTA DE AUDOUIN / LARUS AUDOUINII